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Armengol asegura que la sanidad balear «es muy buena» pese a que faltan 800 médicos y 3.500 enfermeras

Francina Armengol sanidad
La presidenta socialista del Govern balear, Francina Armengol.
Indalecio Ribelles
  • Indalecio Ribelles
  • Redactor OKDIARIO en Baleares, información local de Palma, social y política en general. Antes, redactor en EL MUNDO/ Baleares durante 20 años.

El Govern balear presidido por la socialista, Francina Armengol, asegura que la sanidad balear «es muy buena», pese a que faltan 800 médicos, 3.500 enfermeras, la mitad de plazas de oncólogos están por cubrir, y las listas de espera para una consulta y una intervención quirúrgica han aumentado una media del 20%, como regla general.

Pero a 90 días de las elecciones autonómicas de mayo, en rueda de prensa, el portavoz del Ejecutivo, Iago Negueruela, ha obviado lo que cualquier paciente comenta en centros de salud y hospitales de Baleares, calificando la política sanitaria de Baleares, de «muy buena», y afirmando que «todos los ciudadanos de Baleares deberían de estar orgullosos de su sanidad pública».

Sin entrar en datos, ni cifras, que echan abajo el discurso triunfalista del Govern, Negueruela ha valorado «el acuerdo firmado recientemente por el Govern que, actualmente, se está cerrando, para poner en marcha una serie de medidas con el fin de garantizar una mejor formación y retribución, para todos los profesionales de las islas».

«Mientras en otras comunidades autónomas, como en Madrid, tenían a los profesionales sanitarios saliendo a las calles y con huelgas en marcha, en Baleares se ha firmado un acuerdo en firme para todo el personal sanitario de las islas».

Unas declaraciones que contrastan con las reiteradas denuncias del Sindicato Médico de Baleares que lleva tiempo advirtiendo de que «faltan 800 médicos en Baleares, 350 sólo en Atención Primaria», e insistiendo en que «el Govern debe captar y fidelizar a estos profesionales» en unas Islas donde el sindicato de enfermería, SATSE,  cifra en 3.000 las enfermeras que faltan para llegar a la ratio europea de 8,5 por cada 1.000 pacientes.

Desde la oposición, el portavoz del PP en el Parlament, Toni Costa, ofrecía en rueda de prensa una visión bien diferente a la del dirigente socialista, advirtiendo de que la sanidad pública en Baleares «se encuentra contra las cuerdas», y alertando de que las Islas cuentan con los peores indicadores en materia sanitaria de toda España.

«La peor ratio de médicos, las mayores listas de espera, una situación dramática en Atención Primaria por falta de médicos», ha indicado el portavoz popular quien ha incidido también, que «en Formentera no hay médicos internistas, algunos pacientes de esta Isla esperan hasta 19 horas para ser atendidos en Ibiza, donde el servicio de cardiología está desmantelado, y donde usuarios y sanitarios, plantean movilizaciones ante una situación que roza el drama», lamentó Toni Costa.

«Esta es la situación que vive hoy la sanidad pública en Baleares. Si esto no es preocupante, que venga Francina Armengol y su consellera de Salud, Patricia Gómez, a contárselo a los ciudadanos que la padecen», afirmó Costa.

«Es absolutamente necesario declarar Ibiza y Formentera zonas de difícil cobertura sanitaria, fidelizar a profesionales, mejorar sus condiciones laborales, hacer conciliables sus vidas familiares y laborales. Por eso instamos a Francina Armengol a declarar Ibiza y Formentera zona de difícil cobertura, pero tenemos un Govern que en ocho años ha sido incapaz de hacerlo, incapaz de gestionar, agotado, sin proyectos ni ideas», concluyó el portavoz parlamentario del PP balear.

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